¿Quién no ha visto a un caracol? un pequeño animalito creado por Dios, un molusco con una concha, de diferentes colores y lento…lentísimo, pero con una gran capacidad de avanzar y avanzar y seguir avanzando, a pesar que su camino es peligroso por sus enemigos (las hormigas rojas, escarabajos, serpientes, sapos, tortugas, orugas, parásitos, aves, incluso otros caracoles).
Sabias que este animalito recorre su camino a una velocidad de 0.001 m/s y que recorre aproximadamente en su vida 500 a 800 metros. Y que él nunca se detiene para decir ya no puedo o mañana continuo.
Y esto ¿qué tiene que ver conmigo? bueno no tiene una virtud este animalito, sino varias como su PACIENCIA, PERSEVERANCIA y CONSTANCIA, virtudes que no todos hoy en día contamos, al vivir un mundo tan acelerado, tan competitivo, tan peligroso, tan cambiante, un mundo en donde no nos tomamos un momento para ver esos ejemplos que Dios nos dejó en su creación para aprender grandes lecciones. ¿Cuántas veces te has dado por vencido? ¿Cuántas veces pospones tus proyectos? ¿Cuántas veces simplemente prefieres no hacer nada por miedo? y te has preguntado ¿Por qué?
Porque nos falta sus virtudes:
- PACIENCIA: Es la actitud que lleva al ser humano a poder soportar cualquier contratiempo y dificultad.
- PERSEVERANCIA: Es aquello que se está propuesto a alcanzar, en momentos que uno se propone llegar a un final.
- CONSTANCIA: Firmeza de ánimo. Certeza, exactitud de un hecho.
Virtudes que puedes adquirir si tú deseas en el Señor Jesús, al prestar atención en su creación, en su palabra y en su ejemplo. Solo necesitamos pedírselos. ¡Y verás como todo será distinto a su lado!
No hay comentarios:
Publicar un comentario